El Monferrato, con su extraordinario Barbera, siempre ha sido conocido como la cuna de los grandes vinos italianos. Sin embargo, lo que pocos saben es que el mismo Monferrato, y el Barbera, fueron el punto de partida del sueño empresarial de un italoamericano y un enólogo apasionado, una historia aún por contar.
Frasca La Guaragna, una bodega nacida de una pasión compartida y una casualidad fortuita, decidió invertir en la valorización del territorio en 2017. Fue en ese año cuando Curtis Frasca, un empresario americano con raíces campanas, decidió dejar su ocupación principal para regresar a sus orígenes y dedicarse al sector del vino.
La Calidad Como Misión Empresarial
Desde el principio, Curtis Frasca, conocido cariñosamente como Curt, decidió enfocar sus esfuerzos en expresar su creatividad en el mundo del vino y la hospitalidad, persiguiendo la máxima calidad posible. Esto se vio reforzado por el encuentro con Matteo Gerbi, un enólogo astigiano con mucha experiencia en la región del Barbaresco.
Todo esto culminó en 2018 con el nacimiento de la bodega Frasca La Guaragna. Pero no fue suficiente con nacer, quisieron ir más allá, eligieron un nombre que representara su compromiso con el territorio, y eligieron “La Guaragna”, un viñedo de 10 hectáreas, el primero seleccionado de los que utilizan hoy en día, ubicado en la zona de Nizza Monferrato.
Los primeros años demostraron que sus sueños eran más que eso, eran una realidad cargada de posibilidades y oportunidades. Estuvieron inmersos en una serie de encuentros, debates y degustaciones, principalmente de Nizza y Barbera. Pasaron meses de creación, donde pudieron dar forma al vino que tanto deseaban.
En la actualidad, la bodega tiene 22 hectáreas de viñedo en producción, distribuidas entre los municipios de Nizza Monferrato, Agliano Terme y Moasca, todos seleccionados para resaltar las características de cada terroir.
Producción y Exportación
El enfoque en la calidad ha permitido a la bodega Frasca La Guaragna crecer en producción hasta llegar a las 80.000 botellas anuales, pero la intención es aumentar esta cifra hasta las 150-160.000 unidades. El 70% de la producción está destinada a la Barbera y Nizza; el resto se divide entre las variedades Freisa y Grignolino para los tintos, y Arneis y Riesling para los blancos.
La mayoría de los vinos son exportados, ya que dos tercios de la producción se distribuyen en 12 países a través de quince socios en todo el mundo. Sin embargo, la presencia en el mercado italiano sigue siendo esencial, y la bodega también se enorgullece de contribuir a la promoción y valorización de su territorio de origen.
El Nuevo Futuro: Una Bodega Sostenible
La sostenibilidad medioambiental, la socialidad y la gobernanza empresarial formarán parte de los procesos de la bodega. Esto incluye la instalación de un sistema fotovoltaico y geotérmico, además de la reutilización de materiales de construcción, la recuperación del agua de lluvia y la aproximación a la vendimia “por gravedad”, sin ninguna forzatura a las plantas.
Esta visión innovadora y sostenible refleja una vez más la intención de Frasca La Guaragna de destacar la calidad intrínseca del terroir de Monferrato, creando vinos auténticos y respetuosos con el medio ambiente, y haciendo de su cantina un referente en la producción de Nizza Docg.
