Un almuerzo entre manzanas y un paseo por los bosques en la bodega LasteRosse
En el valle de Non, Trentino, la bodega LasteRosse ha logrado combinar dos de los productos más deliciosos que nos brinda la naturaleza, las manzanas y el vino. Todo gracias a su innovadora propuesta de enoturismo, que ha convertido la recolección de manzanas en una exquisita experiencia acompañada por el vino producido en la bodega.
LasteRosse, cuando las manzanas y el vino se dan la mano
La familia Pancheri, propietarios de la bodega, ha sabido redescubrir el potencial enológico del Groppello, un viñedo autóctono de esta región. A pesar de haber sido olvidado por los lugareños, el Groppello ha demostrado ser ideal para la producción de vino tintos y espumosos. Esta bodega, que se enorgullece de ser una pequeña producción, produce aproximadamente 8,000 botellas al año.
La variedad Groppello es muy valorada, sin embargo, no eclipsa el papel predominante de las manzanas en la región. Como parte de su innovadora propuesta de enoturismo, los visitantes pueden recoger sus propias manzanas y degustar los productos elaborados con ellas. Desde strudels hasta otros productos a base de manzana, combinados naturalmente con la degustación de los vinos locales.
Adopta una fila de viñas y vive la experiencia de la producción de vino
LasteRosse ofrece la posibilidad de adoptar una de sus filas de viñas. Durante un año, los adoptantes pueden ver cómo sus viñas crecen y llevan a cabo la admirable labor de producir vino. Al final de este período, recibirán seis botellas de su Groppello.
Además, LasteRosse propone el «wine trekking», un paseo entre manzanos, bosques y pequeños viñedos, que concluye con una visita a la bodega y la cata de vinos y productos artesanales locales.
LasteRosse abre sus puertas cada jueves y viernes durante el verano para un aperitivo sencillo, pero delicioso, acentuado por un plato de acompañamiento. Un sabroso retrato de la riqueza enológica y gastronómica que Trentino y LasteRosse tienen para ofrecer.