Es un nuevo amanecer para los viticultores de Valencia, ya que la aclamada publicación internacional, ‘The Wine Advocate’, ha otorgado altas puntuaciones a una serie de vinos procedentes de la Denominación de Origen (DO) Valencia. Vinos producidos a partir de uvas locales como Arco, Mandó, Bonicaire, Monastrell, Forcallat, Verdil, Malvasía y Macabeo acapararon la atención de los críticos, evidenciando el rico patrimonio vitivinícola de la región y su potencial para producir vinos de calidad excepcional.
Valorización de las variedades autóctonas de Valencia
El reconocimiento a los vinos de Valencia que galardonó con altas puntuaciones a 59 vinos y 11 proyectos vitivinícolas es fruto de un trabajo de autoconocimiento y reconocimiento. Este esfuerzo fue iniciado por Daniel Belda, quien apostó por embotellar vinos de calidad en los Alforins con variedades de uva locales que hasta entonces habían sido denostadas en favor de variedades más reconocidas o productivas. Esto ha permitido la creación de un perfil de vino mediterráneo más fresco que nos traslada a su origen y define la identidad y el estilo de la Denominación de Origen Valencia.
De hecho, la monastrell, la mandó, la bonicaire, los arcos, la verdil, la macabeo o la malvasía son algunas de las uvas autóctonas de Valencia que se han utilizado para elaborar los vinos que han recibido las mejores puntuaciones de la publicación ‘The Wine Advocate’.
La relevancia de estas puntuaciones es tal que Salvador Manjón, presidente de la DO Valencia, afirmó que estos resultados son «un motivo más para creer en nuestros vinos» y para «continuar trabajando en definir, valorizar y comunicar el que es el principal valor de una Denominación de Origen, su identidad territorial y su tipicidad».
Las bodegas valencianas no solo promueven nuevos proyectos vitivinícolas, sino que revelan una forma de entender el vino que se basa en la defensa del territorio, el paisaje y la tierra, y en la recuperación de las variedades autóctonas para crear unos vinos únicos, auténticos y que reflejan el territorio de donde proceden.
El camino para el sector vitivinícola de Valencia es prometedor. El éxito del vino valenciano no es una casualidad ni una moda, sino que es fruto de un arduo trabajo y de un retorno a sus raíces y tradiciones vinícolas. Como afirmó Rafa Cambra, «no estamos haciendo vinos nuevos, sino más reales, volviendo a lo que éramos». Sin duda, esto es algo que todos los amantes del vino del mundo entero apreciarán.
