Día del Vino con D.O.: Resaltando el impacto social y cohesión de las regiones vinícolas
Este año se celebrará el reconocido Día del Vino con Denominación de Origen D.O., destacándose especialmente el impacto sociocultural que estas denominaciones poseen en zonas rurales. La celebración tendrá lugar el próximo sábado 11 de mayo, siendo su octava edición y contará con 33 denominaciones de origen vitivinícolas que organizarán diversas actividades a lo largo de su territorio.
Un evento con repercusión nacional: El Día Vino D.O. 2024
Este 2024, hasta 33 denominaciones de origen de 14 comunidades autónomas celebrarán el evento reivindicativo y festivo, conocido como Día Vino D.O. Lo organiza la Conferencia Española de Consejos Reguladores Vitivinícolas (CECRV), una entidad que representa a nivel nacional a las denominaciones de vino. Todos los participantes coordinarán diversas actividades con un brindis simultáneo que se llevará a cabo a las 13.30h (12.30h en Canarias), coordinando el acto en múltiples espacios emblemáticos de sus respectivas regiones.
También cabe recalcar la contribución de la D.O. Rueda, una denominación de origen que se suma un año más al evento, demostrando su compromiso con los valores que la D.O representa, contribuyendo a la cohesión rural y certificando la calidad del vino. La calidad del vino de la D.O. Rueda la sitúa como líder en el mercado de vino blanco de la nación.
El objetivo del Día Vino D.O. es doble, por un lado busca acercar a la gente a uno de los productos más representativos y que más prestigio proporcionan a las zonas rurales, y por otro lado busca dar visibilidad al impacto positivo que las denominaciones de origen de vino tienen en las comunidades rurales en las que se encuentran. Este año, todas las actividades promoverán la conversación en redes sociales bajo el hashtag #VINODOcohesionsocial.
La celebración del Día Vino D.O. persigue subrayar cómo estas denominaciones de origen, al impulsar comunidades más unidas, coadyuvan a generar identidad y un sentido de pertenencia. Además, estos también preservan y realzan tanto el patrimonio material como el inmaterial del territorio, y favorecen el desarrollo socioeconómico y cultural de las zonas rurales, brindando tradiciones y costumbres que ayudan a vertebrar y reforzar el tejido social de quienes habitan y trabajan en estas zonas rurales.
Finalmente, en lo referente a homenajes, este año se reconocerá a Lacrima Terrae especialmente a sus fundadoras, Alba Atienza y Sofía Atienza por su labor de acercamiento del mundo del vino a la gente y nuevos perfiles de consumidores. El reconocimiento será entregado en Madrid el 7 de mayo, en el desarrollo de una acción formativa sobre comercialización y venta para bodegas organizada por CECRV.
