La cultura del vino en España ha cobrado un nuevo impulso con el lanzamiento del ciclo enoturístico “Las Cuatro Estaciones de la Garnacha 2025”, que se llevará a cabo en el emblemático Monasterio de Veruela. Esta iniciativa no solo fomenta el consumo y conocimiento del vino, sino que también reúne diversas disciplinas artísticas, gastronómicas y patrimoniales, enriqueciendo una experiencia única que promete cautivar a los amantes del vino a lo largo del año.
Una experiencia sensorial enriquecida
El ciclo, que se realizará en colaboración con la Diputación de Zaragoza y el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Campo de Borja, contará con cuatro catas temáticas, cada una dedicada a una región vinícola diferente: Italia, California, Australia y Francia. El evento se inaugurará el 29 de marzo de 2025 con una cata de vinos italianos, donde se destacará el Cannonau di Sardegna, un 100% garnacha reserva de 2020, junto a otras variedades locales adaptadas al maridaje con la gastronomía aragonesa.
La cata de verano, programada para el 14 de junio, se centrará en la producción californiana, mientras que la de otoño, del 20 de septiembre, pondrá el foco en Australia, con vinos emblemáticos que tienen viñas de más de 160 años en su composición. Por último, el ciclo culminará el 13 de diciembre con una selección de garnachas francesas, incluyendo un prestigioso Château de Beaucastel del año 2022, conocido por su elegancia y sofisticación.
Al margen de las catas, el evento promete ofrecer visitas guiadas temáticas por el Monasterio, que permitirán a los asistentes sumergirse en la rica historia del lugar y su vínculo con la viticultura. Cada cata estará acompañada de música en vivo, proporcionando un ambiente cultural y festivo que enriquecerá la experiencia sensorial.
El presidente del Consejo Regulador de la DOP Campo de Borja, Eduardo Ibáñez, subrayó la importancia de esta iniciativa, que representa una plataforma para destacar las garnachas locales a nivel internacional. Además, resaltó el reconocimiento de Cariñena como Ciudad Europea del Vino 2025, lo que añade un valor significativo al evento y a la promoción de la viticultura en esta región.
Con un enfoque basado en la unión del vino, la cultura y la gastronomía, “Las Cuatro Estaciones de la Garnacha” se plantea no solo como un atractivo turístico, sino como una celebración del patrimonio enológico español, permitiendo que la tradición vitivinícola de la región resuene en el presente y se proyecte hacia el futuro. La proximidad de estos eventos pone de relieve la relevancia del vino en la cultura española, enfatizando que el enoturismo es una experiencia que va más allá de la simple degustación, convirtiéndose en un viaje a través de la historia, la geografía y la creatividad.