Adentrándonos en el patrimonio vinícola de Le Vieux Télégraphe, uno no puede evitar ser sobrecogido por su larga y rica historia. Como icono indiscutible de la región vinícola de Châteauneuf-du-Pape, Le Vieux Télégraphe se mantiene fiel a su tradición y pasión por la creación de vinos de excepcional calidad, bajo la gestión de Frédéric y Daniel Brunier, la quinta generación de la familia al frente de este patrimonio vinícola.
Un legado de incalculable valor
El Vieux Télégraphe, que extrae su nombre de Claude Chappe, inventor del telégrafo óptico que instaló una torre de relés en el dominio en 1821, se remonta a finales del siglo XIX. En aquella época, Henri Brunier donó a su hijo Hippolyte parcelas en el sector de Crau, considerado de difícil cultivo por su densa acumulación de cantos rodados. Sin embargo, fue Hippolyte quien plantó las primeras cepas en estas tierras, que, con el tiempo, se expandieron hasta abarcar 17 hectáreas gracias al esfuerzo de Jules, hijo de Hippolyte. A día de hoy, la finca abarca 98 hectáreas de viñedos en la denominación Châteauneuf-du-Pape y 15 en IGP Vaucluse y AOC Ventoux, además de tener otros dominios asociados, como Les Pallières en Gigondas, y Massaya en el Líbano.
Este venerado viñedo, cuyas vides tienen en promedio 60 años, está situado en el famoso Plateau de la Crau, conocido por la mineralidad que confiere a sus vinos. Además, a través de técnicas de cultivo ecológico como el uso de la confusión sexual para combatir enfermedades, y adaptaciones basadas en las características individuales de cada parcela, se garantiza el cuidado de la vid y la calidad de la uva.
Apuesta por lo tradicional
Cuando se trata de vinificación, Le Vieux Télégraphe elige firmemente por métodos tradicionales, regulando meticulosamente cada parámetro en función del año y de la cuvée específica. Cada vino de Le Vieux Télégraphe es el resultado de esta minuciosa atención a los detalles, manifestándose en sabores profundos, intensos y equilibrados que no caen en la pesadez. Este compromiso con la balance, complejidad y elegancia, hace de Le Vieux Télégraphe una prestigiosa referencia en la región de Châteauneuf-du-Pape.
La elección de varietales de vino abarca desde el Châteauneuf-du-Pape Télégramme, que destaca por su frescura y carácter afrutado, hasta los arómas de cereza negra y notas ligeras a madera del Châteauneuf-du-Pape Piedlong, pasando por los vinos blancos Châteauneuf-du-Pape 2015, que, a pesar de su juventud, resaltan por su equilibrio y sutiles toques especiados. Todos estos vinos cumplen con los altos estándares de la familia Brunier, ofreciendo gustativas recompensas a aquellos que optan por probar las creaciones de Le Vieux Télégraphe.
La calidad constante de los vinos producidos por Le Vieux Télégraphe se ve reflejada en la valoración de prestigiosas guías, tales como La Revue du vin de France y bettane+desseauve, que han otorgado altas calificaciones a la bodega, reconocéndola como una joya vitivinícola en la región de Châteauneuf-du-Pape. Le Vieux Télégraphe, asumido su noble herencia, continúa forjando un legado de inigualable calidad.