La consagrada denominación de origen Toro, ha sido cuna de auténticos triunfos enológicos a lo largo de los años. Gracias a la minuciosa selección de uvas y la dedicada labor de bodegas y viticultores, ha dado lugar a vinos de una calidad exquisita, que se encuentran entre los mejores de España. La historia tiene como protagonistas a 4 vinos destacados: Pintia, de Vega Sicilia; San Román, de Bodegas Mauro; Numanthia, creación de la división de vinos del gigante del lujo Louis Vuitton Möet Hennessy (LVMH); y Victorino, de la familia Eguren.
El tiempo marcado es marzo de 1996 cuando la denominación de origen Toro, con la ciudad de Zamora como capital, comenzó a atraer la atención de destacadas bodegas. Aquí se encuentra la variedad tradicional de uva tempranillo, conocida localmente como Tinta de Toro, que ha permitido elaborar vinos con un grado y madurez excepcionales. En aquel entonces, Vega Sicilia fue una de las primeras en mostrar interés en comprar los mejores terrenos de esta región, un hecho que motivó a otras bodegas a seguir su ejemplo.
El alza de la demanda causó un impacto significativo en el valor de los terrenos y la uva de la zona. Los viñedos empezaron a venderse a precios diez veces superiores y el valor de la uva también experimentó un importante incremento. Todo esto colocó a Toro en el centro de atención, transformándolo en el nuevo El Dorado del vino español.
Pero hacer que estos vinos de calidad superior lleguen al mercado no ha sido un camino fácil. En Toro, los veranos son especialmente calurosos y la maduración de la uva es ardua. Para producir vinos potentes pero equilibrados, se requieren técnicas específicas y un manejo cuidadoso de las uvas. En este aspecto, las bodegas que desembarcaron en Toro debieron desarrollar estrategias y técnicas de elaboración que consiguieran resaltar la calidad de la uva en sus vinos.
Cada uno de estos cuatro vinos presenta características rajamente distintas, siendo Pintia soberbio y elegante, cargado de intensidad y energía; San Román Garnacha intenso, con casta, fruta negra madura cargada de matices, y en boca potente y sabrosa; Numanthia 2018 espectacularmente expresivo, serio, casi antinaturalmente profundo, y en boca muy potente, con una fina acidez, equilibrado y largo; y Victorino 2021 muy concentrado, con una fruta madura que parece dulce, y en boca muy potente y sabrosa.
Son estos cuatro magníficos la carta de presentación de Toro. Cada uno habla de su origen, resalta la calidad de la uva y la capacidad de las bodegas para llevar esta denominación de origen a la cima de la excelencia enológica española.