A pesar de las altas temperaturas estivales, la región vinícola de la Denominación de Origen Almansa avanza con optimismo hacia la vendimia, anticipándose a la media de los años anteriores en muchos de sus municipios. La salud de la vid y su correcta maduración, sin importar las condiciones climáticas desafiantes, es el motor que impulsa este entusiasmo en toda la comarca.
Expectativas excepcionales para esta cosecha
Las variedades tintas, en particular la garnacha tintorera, han madurado notablemente bien y se espera llegar a la cosecha con un excelente estado de madurez y grado. Según Adolfo Cano, presidente de la DO Almansa, a pesar de un 2023 bastante seco, las precipitaciones acaecidas en mayo y principios de junio propiciaron unas reservas de agua adicionales que facilitaron a la planta enfrentar los rigores del verano.
Gracias a este fortuito contratiempo meteorológico, las perspectivas para la calidad de la cosecha de este año y, en particular, la calidad de los vinos embotellados, son muy positivas. La zona de producción de la DO Almansa ha superado el envero – fase en la que los racimos cambian su color a tonos violetas y azulados – en muchos de sus municipios.
La vendimia se acerca
La cuenta atrás para la vendimia 2023 llega con las mejores condiciones de salud para la vid. Sin embargo, aguarda la incertidumbre por una posible inestabilidad climática que pueda alterar el excelente estado de los viñedos. Según adelanta Adolfo Cano, «Es importante tener en cuenta que esperamos que el tiempo no nos deje ninguna tormenta de mayor intensidad que pueda trastocar el estado de nuestros viñedos durante todo el año».
En resumen, a pesar de las incertidumbres climáticas y los desafíos que la vendimia siempre presenta, la DO Almansa se prepara para una cosecha temprana, beneficiada por las condiciones climáticas adecuadas y la excelente salud de la vid. Sin duda, serán tiempos emocionantes para los amantes del vino en los próximos meses.