Las nuevas tendencias y avances en el mundo culinario no se detienen, cada vez más se aisle la perfección y creación de experiencias únicas al paladar. Durante los últimos años hemos visto cómo se desarrolla y cobra fuerza el fenómeno de la gastronomía molecular y su maridaje con diversos vinos. Un reciente estudio en Enoviticultura, llevado a cabo por un laboratorio de Logroño, ha querido ahondar en esta relación.
En el mundo de los vinos, la región de La Rioja, donde se ubica Logroño, es un referente de gran importancia. La tradición vinícola de este lugar permite la producción de caldos de alta calidad, siendo la uva tempranillo la más reconocida por sus características especiales.
El laboratorio en Logroño ha trabajado minuciosamente para analizar y entender el peculiar maridaje entre lo clásico del vino y lo innovador de la gastronomía molecular. Estas fueron las conclusiones más destacadas de su investigación:
1. Evaluación de los sabores: En esta ciencia de la comida y el vino coexisten juntos, de la misma forma que en el maridaje tradicional. Pero el desafío es mayor en la gastronomía molecular, debido a la multiplicidad de sabores que puede presentar un solo plato.
2. Combinación de texturas: Con la gastronomía molecular, las texturas se hacen protagonistas, al igual que los sabores hay que saber combinarlas con el vino correcto, lo cual supone un auténtico desafío.
3. Experimentación y errores: El maridaje molecular es un mundo a explorar, donde el error y la experimentación son guías constantes para comenzar a entender las reglas de este nuevo juego culinario.
Esta visión complicada del arte del maridaje es precisamente lo que lo hace fascinante. Cada día se avanzan pasos en su comprensión y mejora. Aunque todavía hay mucho por descubrir en este escenario de sabores, olores y texturas, ya queda demostrada la gran potencia y atractivo de este fenómeno.
El laboratorio de Logroño sigue trabajando en la búsqueda de nuevas conclusiones y experiencias, siempre con un objetivo en mente, mejorar y destacar la experiencia gastronómica a través del maridaje con vinos de la región y tratar de desentrañar este complejo pero fascinante mundo de la gastronomía molecular.