En la esfera vitivinícola mundial, la exportación de vino italiano ha vivido una temporada amarga durante 2023 como lo reflejan los datos recopilados por el Observatorio de la Unión Italiana de Vinos (UIV). En un informe divulgado recientemente, los cinco principales importadores globales de vino italiano registraron una caída del 4,4% en volumen y del 7,3% en valor económico, lo que representa una pérdida de hasta 4,45 mil millones de euros comparado con las cifras del año anterior.
Un año duro para el vino italiano
Los mercados de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Canadá y Japón, que en conjunto representan el 56% del total de las exportaciones del vino italiano, muestran una tendencia negativa. El mayor golpe se lo llevó el mercado estadounidense, con una reducción en volumen del 13%. Canadá y Japón no se quedan atrás con una disminución del 11%, seguidos de cerca por el Reino Unido con una caída del 9%.
A pesar del panorama general a la baja, Alemania se muestra como un punto de luz en medio de la oscuridad. El país germano cerró el año con un incremento de volumen del 7%, impulsado por un auge en los pedidos de vino a granel, que registró un incremento del 16%.
El presidente de la UIV, Lamberto Frescobaldi, atribuye la difícil situación a la dependencia excesiva de Italia de los mercados consolidados. Según Frescobaldi, es evidente que hay una necesidad urgente de ampliar su base de clientes. Si Italia sigue este camino, Frescobaldi opina que el futuro se presenta retador con una producción de vino en mínimos históricos y la necesidad de aumentar el valor unitario de sus productos en un entorno macroeconómico desfavorable.
Complicando aún más el escenario, el observatorio de la UIV también registro un frustrante descenso del 3% en el precio medio, a pesar del aumento de la importación de vinos a granel (+9%) y formatos grandes (+6%). Asimismo, productos embotellados (-7%) y vinos espumosos han visto una disminución del 11% en volumen, aunque este último ha crecido en precio medio (+5%).
Los retos que enfrenta la exportación de vino italiano no son exclusivos de la península. El informe de la UIV también revela que otros países productores también han experimentado un declive en sus exportaciones de vino. El importe global para los cinco principales compradores fue de 16,9 mil millones de euros, representando un 7,5% menos en comparación con el año anterior. Aunque la situación es difícil, estas cifras representan un desafío para reforzar la presencia del vino italiano en el mercado internacional y encontrar nuevas alternativas para incrementar su valor.
