Introducción
Ariana Nievas podría considerarse un verdadero testimonio de resiliencia y empuje de la mujer actual, que no solo rompe barreras de género, sino que además equilibra con éxito su vida familiar y profesional en el duro mundo de la agricultura.
Adentrándose en un mundo en su mayoría dominado por hombres, Ariana no sólo ha demostrado su capacidad para mantenerse firme, sino que ha encabezado perfectamente las responsabilidades de su vida familiar de crianza de sus hijos.
Del periodismo a la agricultura, una transición sorprendente
Habiendo crecido en una familia sin tierras y sin tener conocimiento previo de la agricultura, Ariana emprendió originalmente su carrera profesional en el campo de la comunicación audiovisual, trabajando en importantes cadenas como Radio Nou o Canal 9. Sin embargo, fue en 2011, tras el nacimiento de su hija y en medio de una crisis con pocas oportunidades laborales, que decidió adentrarse en la agricultura.
«Necesitaba algo que me permitiera criar a mi hija y continuar trabajando, y eso sí me lo ha dado la agricultura», afirma Ariana. Aprendiendo del know-how agrícola de la familia de su marido, Ariana empezó a tomar las riendas de la explotación familiar después de que su suegra decidiera jubilarse.
Su entrada en el mundo de la agricultura sorprendió a muchos. Al principio, enfrentó ciertos prejuicios y comentarios poco alentadores, pero el tiempo abrió los ojos de sus críticos. Ahora, es una inspiración para todas aquellas mujeres que deseen perseguir sus metas, sin importar el campo de trabajo que elijan.
Equilibrio entre la vida familiar y la vida laboral
Ariana ha demostrado que se puede ser una madre dedicada y, al mismo tiempo, una trabajadora eficaz. Con la ayuda de su familia, en especial de su madre y su marido, ha conseguido conciliar las labores agrícolas con la crianza de su hija, muchas veces trabajando en fines de semana o días festivos para garantizar que su hija no se pierda de nada.
Ariana Nievas es un ejemplo de que las mujeres pueden, y deben, romper las fronteras y desafiar las expectativas sociales. Con determinación y coraje, ha demostrado que ser madre y trabajar no son objetivos contradictorios. En vez de ello, ha sido capaz de cultivar sus sueños y criar a su hija al mismo tiempo. En definitiva, Ariana es un verdadero testimonio de que el género no debe ser un obstáculo en la búsqueda de los sueños o en la elección de una profesión.
Hoy, no sólo desempeña su trabajo con éxito, sino que también forma parte del órgano rector de la Cooperativa de San Roque de Villargordo del Cabriel, convirtiéndose en la primera mujer en hacerlo. Sin duda, Ariana Nievas es un ejemplo brillante de determinación, fuerza y resiliencia.