La exportación italiana de vino al Lejano Oriente se ralentiza en 2023
El año 2023 ha traído mala fortuna para el vino italiano en el Lejano Oriente. Según un informe de Nomisma Wine Monitor, las importaciones de vino italiano han mostrado un descenso constante en China, Corea del Sur y Japón, con cuotas de mercado del 10%, 13% y 12%, respectivamente. ¿La gran ganadora? Francia, que consolida su liderazgo en estos mercados del vino.
El dilema del vino en el mercado chino
El mercado chino ha sufrido una caída de más del 20% en 2023 en comparación con el año anterior. Desde 2018, China ha perdido cinco posiciones en el ranking mundial por valor del vino, cayendo del cuarto al noveno puesto. Aunque Italia sigue ocupando el tercer puesto en el ranking, solo acapara el 10% de la cuota de mercado, superada por Chile y Francia, esta última con la mitad del mercado.
Este panorama negativo también se ha replicado en otros países del Lejano Oriente, aunque en menor medida. Corea del Sur y Japón han experimentado reducciones tanto en el valor como en el volumen de las importaciones de vino italiano. A pesar del descenso, Francia sigue siendo el principal socio comercial de Corea del Sur, seguida por los Estados Unidos, Italia, Chile y España.
¿Y qué ocurre en Japón?
En 2023, Japón también ha reflejado las tendencias negativas en las importaciones de vino italiano, tanto en valor como en volumen. La línea de liderazgo sigue estando claramente marcada por Francia, con casi el 60% del mercado. En este ranking, Italia ocupa el segundo lugar con un 12%, manteniendo la estabilidad con respecto al 2022.
La conclusión de este informe es que, a pesar de los problemas económicos y comerciales actuales, tanto Japón como Corea del Sur aún presentan un buen potencial de crecimiento e interés en los vinos italianos. Sin embargo, la Italia vitícola tiene ante sí el desafío de reinventarse para recuperarse en estos difíciles mercados del Lejano Oriente. Definitivamente, no será una tarea fácil, pero con la calidad y la tradición de los vinos italianos, todo es posible en el horizonte.