Extrema Urgencia Climática Afecta a la DOP Alicante
La Denominación de Origen Protegida (DOP) Alicante está enfrentando la titánica tarea de sobrevivir a las severas condiciones climáticas que se han precipitado en su área. Más de un año sin lluvias consecuentes en las regiones vinícolas ha puesto a prueba tanto la tenacidad de los viticultores como la resistencia de las viñas.
Mientras el sol sofocante del verano amenaza con altas temperaturas y sequía, las uvas para la vinificación comienzan su proceso de cuajado, etapa crítica para definir tanto la cantidad como la calidad de la cosecha futura. Ya existen informes de marcados estrés en las plantas y dificultades en el cuajado, lo que presagia un año complicado para la producción.
El caso más delicado es la situación de la Moscatel de Alejandría en la comarca de la Marina Alta. Esta región, carente de sistemas de irrigación y con un cultivo esencialmente en terrazas, se enfrenta a las consecuencias de la falta de lluvia. Sumado a esto, la fauna salvaje, en su desesperación por encontrar alimento fresco, ha agravado la problemática.
La presidenta de la bodega San Vicente Ferrer de Teulada, Joselina Vallés, expresó su preocupación sobre el futuro vitivinícola de la comarca. Ante la falta de recursos, mantener las instalaciones para una producción mermada representa una gran presión, especialmente cuando la trazabilidad de la uva de vinificación tiene un compromiso tan fuerte con el territorio.
José Juan Reus, presidente del Consejo Regulador y de Bodegas Xaló, secunda esta inquietud. Manifiesta la importancia del cultivo dado que la calidad de la Moscatel ha captado la atención del consumidor de forma creciente. La pérdida de rendimiento y la afectación del entorno local es un serio problema.
En Vinalopó, a pesar de contar con más sistemas de regadío, el precio del agua dificulta su uso. Al igual que en Alicante, viñas de monastrell se ven afectadas por la sequía en condiciones extremas. Varios informes indican que algunas cepas en tierras fuertes han comenzado a secarse.
Ante la grave situación, el Consejo Regulador tiene previsto solicitar ayudas directas a las administraciones y una mayor sensibilización con el sector del vino local, cuyo paisaje y economía dependen en gran medida de la producción de la vid.