El vino Can Blau 2016, procedente de la D.O. Montsant, destaca en el panorama vinícola por su meticulosa elaboración y su rica combinación de variedades autóctonas. Este robusto tinto, que se compone en un 40% de Cariñena, un 40% de Syrah y un 20% de Garnacha, es producto de un cuidado proceso enológico que se traduce en un vino lleno de carácter y complejidad.
UN VINO DE CARÁCTER EN MONTSTANT
La bodega Can Blau ha logrado posicionarse como un referente en la región por su compromiso con la calidad y la autenticidad. Este vino no solo es una expresión de la tierra, sino también de la filosofía de la bodega, que busca resaltar las particularidades del terroir. La crianza en roble francés, tanto nuevo como usado, es esencial para suavizar los taninos y aportar el equilibrio necesario que este vino exige.
Visualmente, Can Blau 2016 se presenta en un profundo rojo cereza, con encantadores reflejos morados. Esta apariencia anticipa la intensidad que se despliega en nariz y boca.
- Nariz: Al acercarte a la copa, te envuelve una sinfonía de aromas, donde la fruta madura y las especias se entrelazan, ofreciendo un abanico aromático singular que nos habla del potencial de Montsant.
- Boca: En el paladar, este vino se siente frutal y potente. Su carácter carnoso y concentrado está repleto de notas de terruño, brindando una experiencia gustativa elegante, que culmina en un final largo, fresco y especiado.
La temperatura de servicio ideal para disfrutar de este vino oscila en torno a los 15ºC. Es fundamental mantener una temperatura constante, ya que las fluctuaciones pueden alterar las características organolépticas del vino.
EXPLORANDO LAS RAÍCES DE CAN BLAU
La finca que produce Can Blau 2016 abarca 35 hectáreas, con una edad media de sus viñas de aproximadamente 40 años. Este aspecto es crucial, ya que viñas más maduras tienden a ofrecer rendimientos más bajos, pero de calidad superior. Es importante mencionar que la Cosecha 2016 fue realizada mediante vendimia manual y con una meticulosa selección en bodega.
El suelo de los viñedos también contribuye a la personalidad del vino. Este se compone de distintos tipos: arenoso y arcilloso para la Cariñena, calizo para la Syrah, y pizarroso y calizo para la Garnacha. Esta diversidad de suelos aporta a la complejidad y riqueza que se palpan en cada sorbo.
El clima de la región, que se caracteriza por ser mediterráneo con influencias continentales, juega un rol fundamental en el desarrollo de las uvas, asegurando su maduración óptima y la concentración de sabores. Durante el proceso de vinificación, se lleva a cabo una fermentación en depósitos de acero inoxidable durante aproximadamente 20 días a una temperatura máxima de 25ºC, seguida de fermentación maloláctica, lo que contribuye a suavizar la acidez del vino.
MARIDAJE Y PERSPECTIVAS
Cuando se trata de maridar Can Blau 2016, las opciones son amplias y deliciosas. Este vino se complementa notablemente con:
- Arroces con carne de caza.
- carnes blancas y rojas a la plancha o parrilla.
- Legumbres estofadas.
- quesos curados y azules.
- Setas y aves.
- Cazuelas, pescados y mariscos en salsa.
- Asados de cordero, cerdo y buey.
Los matices de este vino no solo se ven reflejados en su composición, sino también en su versatilidad al momento de ser disfrutado. Tanto si optas por una cena sofisticada como si prefieres un momento de relajación al final del día, este vino se presenta como un compañero ideal.
LA OPINIÓN DE LOS EXPERTOS
Las críticas hacia Can Blau 2016 han sido en general muy positivas. Muchos expertos han destacado su equilibrio y complejidad, citando que «cada sorbo cuenta una historia de su lugar de origen». Beber este vino es más que solo un acto de degustación; es una invitación a explorar la riqueza del Montsant.
Algunas voces han señalado que, aunque es un vino que puede disfrutar ahora, su calidad le permite continuar evolucionando en la botella durante los próximos dos años. Es una oportunidad de seguir experimentando su desarrollo y apreciar los cambios que proporciona el tiempo.
Este tinto se posiciona así como una manifestación del potencial vitivinícola de España, especialmente de la región de Montsant, que sigue sorprendiendo con sus singulares creaciones.
UNA INVITACIÓN A DESCUBRIR
Al final, Can Blau 2016 es un vino que sobresale no solo por sus cualidades organolépticas, sino también por la historia que narra su origen y producción. Cada botella es un viaje sensorial a las tierras de Montsant, y su complejidad y elegancia lo convierten en una opción ideal para exploradores del vino.
¿Por qué no aventurarte a descubrirlo tú mismo? Tal vez sea el momento perfecto para abrir una botella y dejarte llevar por la magia que encierra cada sorbo de este magnífico tinto. ¿Qué nuevas historias te revelará en tu paladar?