Les Manyes 2015 es un vino que se alza como una joya en la región del Priorat, cuya mezcla de tradición vitivinícola y el particular terroir del lugar brindan una experiencia sensorial única a quienes tienen la fortuna de degustarlo. Este tinto monovarietal de Garnacha, elaborado por la bodega Terroir al Límit, es una reinterpretación de lo que puede ofrecer esta variedad en altitudes significativas, lejos del característico suelo de pizarra del Priorat.
EL VINO Y SU ORIGEN
Procedente de un viñedo en altura, concretamente desde una finca situadas a 800 metros sobre el nivel del mar, cerca de Scala Dei, Les Manyes destaca por su particular suelo arcilloso, que confiere al vino frescura y personalidad. Este viñedo, en el que las vides tienen alrededor de 50 años, se encuentra orientado al oeste, disfrutando de un clima mediterráneo que aporta los matices necesarios para el desarrollo óptimo de la Garnacha.
La cosecha, que se realiza manualmente en pequeñas cajas de 10 kilos, refleja el compromiso con la calidad desde el primer paso en el proceso. La vinificación se lleva a cabo al estilo tradicional de Borgoña, utilizando levaduras indígenas y evitando el despalillado. Aquí, el vino fermenta de manera espontánea, lo que otorga una autenticidad característica.
NOTAS DE CATA
A la vista, Les Manyes presenta un color profundo y atractivo, que invita a explorar su complejidad. En nariz, el vino despliega una aroma excepcional, marcada por notas florales y frutales, que suscitan interés desde el primer encuentro. Según The Wine Advocate, ¡se describe como "exuberante y abierto"! En boca, se presenta sorprendentemente fresco, con una acidez vibrante que recuerda a los cítricos. Los críticos no ocultan su admiración: James Suckling resalta que es un vino emocional, con un paladar denso que evoluciona en el tiempo, envuelto por unos taninos polvorientos.
Estas características hacen que la experiencia de degustar Les Manyes sea un viaje a través del paisaje prioratino, como bien apunta su descripción: "capaz de trasladarnos a un paisaje desde el primer trago". Esta singularidad del vino se debe, en parte, a su crianza que dura un total de 24 meses en combinación de barricas de roble francés y foudres austriacos, lo que aporta complejidad sin abrumar con sabores a madera.
CRÍTICAS Y OPINIONES
Las críticas hacia Les Manyes 2015 no se han hecho esperar, y son dignas de mención. Como se mencionó previamente, The Wine Advocate lo describe como “posiblemente el mejor Les Manyes jamás elaborado”. La puntuación de 95 puntos refleja un vino que, año tras año, logra superarse a sí mismo. Con una producción limitada de 1,865 botellas, cada unidad de este elixir es un tesoro para el amante del vino.
James Suckling también se une a los elogios, otorgando una puntuación de 94 puntos y destacando que se trata de un vino que se puede beber en este momento o guardar por unos años más. La ventana optativa de consumo se extiende hasta 2028, lo que lo convierte en una opción perfecta tanto para quienes desean disfrutar del momento presente como para los más pacientes.
CONCLUSIÓN Y REFLEXIÓN FINAL
Les Manyes 2015 es un tinto que no solo celebra la Garnacha, sino que también representa la esencia del Priorat en una botella. Con una producción reducida, un equilibrio magistral entre frescura, aromas florales y una estructura robusta, este vino merece un lugar en la mesa de aquellos que valoran lo excepcional. Su carácter es un testimonio directo del terroir donde se origina y del trabajo meticuloso de la bodega Terroir al Límit.
Si bien Les Manyes es un vino para disfrutar ahora, las distintas notas y matices que irá desarrollando en los próximos años invitan a ser explorados. La pregunta que queda en el aire es: ¿Cómo mejora este vino en tu paladar a medida que transcurren los años? Este 2015 espera, pacientemente, a ser descubierto por los vínculos que creamos con cada sorbo, quizás en una cena especial o en un acto de celebración. El futuro nos espera con copas en mano y Les Manyes al alcance.