El acto de brindar es un gesto universal, aunque con peculiaridades que varían dependiendo del país y la cultura en cuestión. Este rito de celebración puede tener una gran cantidad de matices y particularidades, desde la elección de la bebida hasta el modo en que se lleva a cabo el brindis.
Brindar alrededor del mundo
En países como España e Italia, se considera mala suerte realizar un brindis con bebidas no alcohólicas. Además, es imprescindible mirar a los ojos durante el brindis y llevarse al menos un sorbo de la bebida elegida.
En contraste, en países como Francia y Alemania, el contacto visual también es una regla infaltable, al igual que evitar beber antes del brindis. Los galos incluso sugieren no llenar más de la mitad de la copa, y en el caso de los alemanes, es común chocar las copas en el momento del brindis.
Por otra parte, en China y otros países asiáticos, el brindis cobra un significado más profundo ya que va estrechamente ligado al cierre de negocios. Es aquí donde la edad de los presentes es un factor clave en el momento de servir la bebida, y se considera obligatorio terminar con todo el contenido de la copa o vaso.
En Hungría existe una curiosa tradición histórica que implicó la prohibición del brindis de 1848 hasta 1998, debido a que este acto recordaba las victorias de Austria sobre Hungría en el siglo XIX. A día de hoy se considera ofensivo brindar con cerveza en este país.
En otro rincón de Europa, específicamente en Georgia, el brindis va acompañado de una historia narrada por cada participante que pretende homenajear al personaje central del encuentro.
Finalmente, en Suecia, tradción que se remonta a la era de los vikingos, se realiza el brindis mirándose a los ojos fijamente. Esto era una forma de asegurarse que el oponente no iba a desenfundar una espada para atacarlos. A día de hoy, se mantiene esta costumbre como una muestra de respeto.
En conclusión, el mundo está lleno de rituales interesantes respecto al brindis, sólo queda elegir el apropiado para cada ocasión y celebración.