Un golpe al fraude: la Guardia Civil desmantela una red de vino falso
En un desarrollo impactante que ha llamado la atención del sector vitivinícola, la Guardia Civil de España ha llevado a cabo una operación que ha resultado en la desarticulación de una red criminal dedicada al tráfico de vino falso, particularmente centrada en la Denominación de Origen Calificada Rioja. Este operativo, conocido como Operación Epígrafe, ha puesto de manifiesto la creciente preocupación por el contrabando de productos alimenticios y las implicaciones económicas que ello conlleva.
El descubrimiento que inició la investigación
La investigación comenzó en marzo de 2023, cuando un turista español se topó con una botella sospechosa de lo que decía ser ‘vino Rioja’ en una tienda de Vietnam. Este hallazgo, que incluía etiqueta y embalaje fraudulentos, llevó a una serie de análisis que revelaron que ninguno de los componentes cumplía con las estrictas normativas de la DOCa Rioja. Ante esta evidencia, la Guardia Civil intensificó su investigación, descubriendo que la red operaba a través de varias empresas ficticias con base en la Comunidad Valenciana.
- Exportación masiva: Se estima que hasta 24,000 litros de vino falso fueron enviados a China.
- Empresas implicadas: Las operaciones se realizaban a través de tres compañías en Valencia que compraban vino no autorizado, lo reempaquetaban y lo enviados a mercados asiáticos.
- Marcas engañosas: Un total de 17 marcas fraudulentas fueron identificadas, muchas de las cuales imitaban etiquetas reconocidas
Los arrestos y su importancia no se quedaron atrás; siete individuos, con edades comprendidas entre 35 y 65 años, fueron detenidos y están siendo investigados por diversos delitos, incluyendo infracciones de propiedad industrial y pertenencia a organización criminal. Si bien han sido puestos en libertad a la espera de juicio, la investigación continúa, centrándose en el alcance total del fraude.
Las autoridades han dejado claro que aún hay un largo camino por recorrer en esta investigación, con la posibilidad de que se identifiquen más individuos y empresas implicadas. La lucha contra el vino falso no solo es un asunto legal, sino que también afecta a la reputación de la viticultura española, poniendo en jaque a un sector que ya enfrenta desafíos en mercados emergentes como el asiático.