En el corazón de la Toscana se encuentra una joya vinícola que ha logrado posicionarse como un referente en el sector: Vallepicciola. Este proyecto, iniciado en 1999 por Bruno Bolfo y su hermana Giuseppina, cuenta con 107 hectáreas de viñedos, donde se cultivan seis variedades de uva y se producen aceites de oliva de alta calidad. Vallepicciola no solo representa la tradición vitivinícola de la región, sino que también destaca por su estructura arquitectónica moderna, diseñada por Margherita Gozzi y equipada con las instalaciones necesarias para la vinificación y el enoturismo.
Un Referente en la Producción de Vino
Vallepicciola alberga en sus instalaciones una capacidad de producción de alrededor de 500,000 botellas anuales que se distribuyen principalmente en el mercado nacional, aunque más del 50% se exporta a países como Estados Unidos y en diversas naciones asiáticas. Los viñedos, ricos en esencia, producen un Chianti Classico DOCG bien reconocido y una variedad de vinos IGT de gran prestigio.
Hasta el momento, Vallepicciola ofrece un portafolio de vinos amplio que incluye diferentes estilos, tales como:
- Vallepicciola Toscana Bianco IGT – 100% Chardonnay.
- Vallepicciola Toscana Rosso IGT – 100% Sangiovese.
- Migliorè Toscana Rosso IGT – blend de Cabernet Franc, Cabernet Sauvignon y Merlot.
Los vinos de este viñedo son el resultado de un trabajo meticuloso, reflejando la dedicación del enólogo Alessandro Cellai, quien se ha formado bajo la tutela de renombrados expertos del sector. Vallepicciola se distingue no solo por su producción vitivinícola, sino también por fomentar el enoturismo en la región, ofreciendo experiencias únicas que permiten a los visitantes explorar los viñedos y participar en catas especializadas.
La sinergia entre tradición y modernidad en Vallepicciola promete continuar posicionando a este prestigioso productor entre los más destacados en el competitivo mercado del vino internacional, preservando al mismo tiempo la rica herencia cultural que la región de la Toscana representa.