En pleno auge de la era digital, los representantes de la Generación Z, nacidos entre 1997 y 2012, se encuentran en el epicentro de un cambio trascendental en el consumo de alcohol. Este grupo demográfico está estableciendo nuevas pautas, colocándose en el frente de una tendencia que va en contra de las tradiciones arraigadas, en favor de una vida más saludable y consciente.
Fruto de su inherente conexión con la tecnología, la Generación Z posee una peculiar característica que define su comportamiento: el acceso más fácil a la información. Ante la avalancha de información sobre los efectos del alcohol, han optado por alternativas más saludables y reducido su consumo. El Open Society Institute, recientemente, destacó que la ingesta de alcohol en este grupo demográfico ha disminuido un 20% en comparación a generaciones previas.
1. Adopción de estilos de vida saludables: la Generación Z se apoya en la búsqueda de la transparencia, la autenticidad y la elección consciente. Las plataformas de las redes sociales han alimentado estas tendencias, proporcionando una gran cantidad de información sobre los efectos perjudiciales del alcohol.
2. Descenso en el consumo de alcohol: debido a la creciente conciencia de salud y bienestar, ha habido un notable giro hacia las bebidas no alcohólicas. Este cambio se vislumbra en el auge de alternativas como los mocktails, vinos sin alcohol y cervezas sin alcohol, que están ganando popularidad en el mercado gastronómico.
3. Nuevas oportunidades para las marcas: este cambio de paradigma abre puertas para las marcas de bebidas para explorar estos nichos de mercado emergentes y ofrecer alternativas en consonancia con las expectativas de este grupo de consumidores.
Teniendo en cuenta el impacto económico y social del alcohol, este cambio en la cultura del consumo es un cambio bienvenido. La Generación Z y su creciente predisposición hacia el consumo consciente y saludable, son muy seguramente los precursores de una nueva era en la industria de las bebidas alcohólicas y de la salud pública en general. En el futuro, será interesante ver cómo las marcas de la industria se adaptan para captar la atención de esta generación tan influyente. No cabe duda de que el cambio está en el aire, y parece que ha llegado para quedarse.